
Uno de los mayores temores que tenemos como propietarios del un coche es el de sufrir una avería mecánica severa. Y de entre estas, ninguna es equiparable a las que afectan al motor, el elemento principal, más complejo y sofisticado de cualquier vehículo.
Las soluciones para superar una avería del motor no son fáciles, pero de entre las existentes, hay una que cada vez cobra más importancia, la de comprar un motor de segunda mano e instalarlo en el vehículo.
Repasamos a continuación los aspectos a tener en cuenta si se quiere optar por esta solución.
¿Por qué un motor usado o de segunda mano para el coche?
En primer lugar, por economía: el coste de adquirir un bloque usado a una empresa especializada es radicalmente inferior al de comprarlo nuevo al fabricante. Además, debido a factores de diversa índole, estos motores pueden estar en buen estado pese a tener uso, contar con un kilometraje relativamente corto o servir solo para hacer una parte de la sustitución o reparación del bloque averiado.
Relacionado con el punto anterior, un motor de segunda mano tiene la ventaja de contener la mecánica entera, por lo que es una opción perfecta si se quiere disponer de recambios de todo tipo de piezas para nuestro coche clásico o moderno. Para ello es cierto que se necesitan conocimientos avanzados de mecánica, pero por el precio de unas pocas piezas de recambio original, se puede adquirir un motor entero que permitirá anticiparse a otras futuras averías que puedan surgir en el motor.
¿Dónde encuentro un motor de segunda mano con garantías?
Desguaces
Estos negocios no se deben entender nunca como un lugar donde únicamente se acumulan coches achatarrados, sino como una fuente casi inagotable de recambios a precios asequibles. Es especialmente interesante buscar opciones como las de centrales de desguaces, empresas que gestionan el stock conjunto de diversos desguaces, ampliando las posibilidades de encontrar aquello que se busca.
A día de hoy cuentan con inacabables stocks de motores de desguace, ofrecen garantía de uso, entregan en cualquier lugar del país y sus precios son competitivos y adaptados a las necesidades del cliente. Bajo nuestra experiencia, es una alternativa muy a tener en cuenta respecto a los desguaces tradicionales.
Coches donantes
Otra práctica habitual, aunque esta implica una mayor inversión que la anterior, es adquirir un vehículo, en estado de circulación o no, para usarlo como donante de piezas para el coche a reparar. Un coche donante tiene la virtud de contar con recambio no solo de motor, sino de otros elementos caros y complejos como la caja de cambios, la transmisión o las suspensiones. Además, por supuesto, de todas las piezas interiores y de carrocería.
Si se encuentra un coche donante a un precio razonable y se dispone de espacio, una opción es comprarlo y desguazarlo, para guardar todos los recambios que se puedan necesitar, o venderlos para recuperar parte de la inversión.
Recomendaciones rápidas antes de hacer un cambio de motor al coche
- Saber lo que se hace: si no se tienen los conocimientos necesarios, es vital contratar a un mecánico por horas o por proyecto para realizar esta tarea.
- Disponer del utillaje y las instalaciones adecuadas, incluyendo foso con pluma para levantar el motor o elevador.
- No tener prisa: sabemos por experiencia que estas reparaciones se alargan, salen inconvenientes y pueden llegar a ser frustrantes, por lo que lo básico es tomarlo como un proyecto sin urgencia y con el objetivo de que el resultado sea satisfactorio.
- Aprender en el proceso, tomar anotaciones, hacer fotos, buscar información en Internet y en manuales… aprovechar esta oportunidad para seguir aprendiendo.